Huertos del Diablo (Norte y Sur), Peña Melluque, Ranchón, Panchón, Pico de la Mojonera y Peña del Arca desde el Pto Ventana
28 de Junio de 2022
Hacia tiempo desde la última visita al macizo de las Ubiñas, tanto que he tenido que recurrir al historial del blog para saber que esta fue el ascenso de Ubiña por el espolón este hace casi un año.
Está claro que salgo poco al monte!!!!!
Desde el puerto Ventana, el grupo de cimas de los Huertos del Diablo, Panchón y Ranchón quedan muy a mano. Cimas ya recorridas varias veces, pero que por encontrarse tan apelotonadas y tener formas poco diferenciadoras, no llego a aclararme cual es cada cual. Por eso decido un recorrido que me permita (de una vez por todas) recorrerlas, mientras afianzo tanto sus nombres como su disposición dentro del conjunto de cimas y valles.
Los viejos caminos mineros me permiten ganar con rapidez y comodidad altura y plantarme en la cima del Rebollosas, cima cercana a los dosmil, de traza muy distinta al grupo de los Huertos (es una cima de pudinga y cubierta de escobas), pero un excelente mirador de las montañas que voy a recorrer.
A sus pies (y hacia el norte) la Vega de Socellares, un polje rodeado por las estribaciones del macizo que tiene en el Pico Sobre el Tambarón su mayor exponente.
Desciendo, con la vista fija en la vega, hacia el collado que separa el Rebollosas de las cimas calizas y comienzo el ascenso por un sendero que busca los mejores pasos para llevarme hasta una pequeña vega entre el Melluque y el Huerto Norte.
Ganada la altura resulta fácil transitar por las cimas. La primera la cima del Pico de la Cueva del Melluque que ofrece una visión muy próxima de los Huertos del Diablo y sobre todo del valle donde se asienta Torrebarrio y de la Babia con su infinidad de cumbres.
Vuelvo sobre mis pasos al collado para afrontar por la arista el ascenso al Huerto del Diablo Norte del que no llego a entender la toponimia de su nombre, ya que tanto el norte como el sur resultan cimas menos agresivas que sus vecinas el Panchón o Ranchón.
Pero sé, por otros ascensos, que desde su cima se disfruta de unas vistas escandalosas sobre los puertos de Agüeria, posiblemente el espacio con mayor concentración de acebos en la Península, donde la Peña Rueda cierra el cuadro por el este, mientras el binomio Tapinón-Siegalavá lo hace más al sur.
Fácil paso hasta la cúspide del Huerto Sur, donde se repiten las vistas hacia Agüeria, ampliándose hacia los ya más cercanos Ranchón y Panchón.
Ya son cuatro cimas y las piernas aún quieren más, por lo que continuo por la arista hacia la Boca de Rolamuela, el collado desde donde comienzo el ascenso al Ranchón, que solo presenta la dificultad del desnivel a salvar.
Bonito buzón el del Ranchón y buenas vistas de los puertos de Agüeria, del Valle y Joyo de Colines y del grupo del Fontán (Norte, Sur y Prau) que ya se ven más próximos.
Sigo aristeando hasta el Panchón, en cuya cima apenas hay espacio para el hito de piedras que marca el punto más elevado y sin apenas parar, continuo por la arista en busca de un paso que me permita descender hasta la vega del Robezo (lo hare por una grieta arrastrando el culo de manera poco elegante).Y van seis!!!
La pasión por las cumbres (y que es el camino más lógico para volver) me lleva nuevamente a tomar altura para encaramarme sobre el Pico de la Mojonera y la cercana Peña del Arca que da buenas vistas del conjunto recorrido y del Valle de Torrebarrio.
Ocho!!!! ya está bien!!!! Busco el paso que bordea la ladera oeste del Huerto Sur para volver al collado entre el Melluque y el Huerto Norte. Y paro para comer el bocata, para relajar las piernas y para ver alzarse los penachos de niebla que comienzan a entrar de la vertiente asturiana.
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