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Roblones próximos a la majada del Pico. |
18 de octubre de 2022
De nuevo rodando.
En esta ocasión a caballo entre las cuencas del Cea y del Carrión, por las tierras de Riocamba, la inmensa mancha de pinar, fruto de las políticas de repoblación de mediados del siglo pasado, que actualmente gestiona unas 5000 toneladas de madera al año.
Tierras de pinares que conserva en su interior, al más puro estilo Astérix, una pequeña isla de viejos robles que ha conseguido sobrevivir en este mar de pinos.
Inicio y fin en Villaverde de Arcayos por un recorrido circular que me lleva en primer lugar al Santuario de la Virgen de Yecla y entre bosques de robles hacia pueblos desconocidos como Canalejas y Calaveras de Abajo y de Arriba hasta salir del límite de la provincia y entrar en Palencia a través de San Pedro de Cansoles, desde donde ya entro propiamente en el pinar de Riocamba.
Hacia el centro forestal de Riocamba hoy reducido a solo una gran dependencia, pero donde durante la política de repoblación, decenas de familias trabajaron y vivieron, llegando a crearse una escuela para la educación de sus hijos e incluso una ermita.
La vuelta por un cortafuegos-pista con paredes de pinos a ambos lados, hacia la majada del Pico, una pequeña elevación donde un reducto de robles se resiste a dejar su espacio al pinar y donde unos ejemplares de proporciones más que notables me servirán de apoyo mientras observo el balanceo de su ramas y escucho sonido de las bellotas al desprenderse, sabiendo que lo que resta de ruta es en descenso.
Villaverde de Arcayos.
Los pueblos ya no son solo un lugar donde vivir, hoy se engalanan sus plazas con flores y murales para hacer un espacio más apetecible.
Primeras luces.
Santuario de la Virgen de Yecla.
Todos los 15 de agosto los romeros llegan hasta el Alto de Yecla a llorar, cantar y reír en honor de la Virgen de Yecla.
Vistas desde la explanada donde se asienta el santuario.
Por pistas donde el robledal se intercala entre el pino.
Y donde en algunos puntos ya encontramos robles de gran tamaño.
Canalejas.
Iglesia de San Cosme y San Damián (Canalejas)
El inmenso valle de Canalejas llega hasta Almanza (que se llega a ver al fondo entre los árboles).
Eso, Calaveras de Abajo)
Calaveras de Arriba.
Mural decorado por la restauradora y artista que vive en ese pueblo.
Calaveras de Arriba.
Más robles notables de camino a....
San Pedro de Cansoles.
Que es Camino Olvidado.
San Pedro de Cansoles (Palencia)
En este punto alcanzo un camino que recorre el valle por el que fluyen las aguas del arroyo de Rebedul.
Con diferencia el tramo más disfrutado de la jornada.
Un trazado con el que sueñas, kilómetros de buen camino por el centro de un valle, sin desnivel, donde poder rodar sin esfuerzo y donde un precioso gato montés tuvo la osadía de cruzar el camino delante de la rueda de mi bici.
Pero es preciso dejar el valle y remontar hacia el centro forestal.
Los colores del otoño se van pintando.
Tierra de pinares.
Centro forestal de Riocamba.
Fachada con escudos procedente de una casona hidalga de Vegamián, que fue mandada desmontar, trasportar hasta Riocamba y vuelta a montar por orden de un ingeniero de montes que había trabajado en el pantano de Vegamian.
Torre de vigilancia.
Vértice geodésico Ojascal (1085 m).
Los robles se entremezclan con los pinos.
Al fondo el macizo de Peñacorada.
Konicoleando.
Hacia la majada del Pico.
Robles notables.
Majada del Pico.
Según la tablilla es un ejemplar con unos 850 años.
Y este con 1000 años de antiguedad.
Sin una persona que sirva de referencia es difícil hacerse una idea de su gran tamaño.
Recuerdo otro día que nos acercamos a golpe de nordic walking a este lugar (ver ese día). Majada del Pico.
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