Salamanca
26 de enero de 2025
Salamanca nos recibe con niebla y con frío.
Ciudad universitaria, monumental y Patrimonio de la Humanidad desde 1988.
Apenas unos minutos para tomarnos un café, calentar las orejas y salimos a sus calles, donde la piedra luce un tono levemente sonrosado y donde nos cruzamos con sus habitantes de caras serias, aburridas, que con resignación van camino de sus trabajos.
Coño Don Vicente (del Bosque) usted por aquí!!!!!
Plaza Mayor
Centro histórico de Salamanca.
Construida en el siglo XVIII (entre los años 1729 al 1756), luce estilo barroco, tiene forma cuadrada irregular y soportales en su totalidad.
Nos sorprende por su tamaño, donde uno queda empequeñecido cuando uno se sitúa en su centro y donde la gente se acumula según llegamos a las horas centrales del día.
Interesante la colección de medallones de personajes ilustres.
Plaza del Corrillo.
Iglesia de San Martín de Tours
Pequeña joya románica aprisionada entre edificios.
Torres de la Clerecía.
La niebla comienza a despejarse y en nuestro afán de buscar un cielo azul tropezamos con las Torres de la Clerecía.
Actualmente ocupado por la Universidad Pontificia de Salamanca.
Casa de las Conchas.
Justo enfrente de las Torres de la Clerencía (tan enfrente y cercano que por mirar al cielo casi lo pasamos de largo).
Palacio señorial construido a finales del siglo XV, presenta un estilo gótico, plateresco y mudéjar y cuyo nombre deriva de las más de 300 conchas que decoran su fachada.
Actualmente el edificio alberga una biblioteca pública.
Entrada a la biblioteca y Casa de las Conchas.
La entrada a su patio es gratuita.
Las Torres de la Clerecía desde el patio de la Casa de las Conchas.
Callejeando en busca de la Catedral de Salamanca.
Catedral de Salamanca (Catedrales de Salamanca)
Porque a los salmantinos no les basta con una, tienen dos catedrales.
Hay un viejo dicho que afirma que no hay mejor cantera que la iglesia vieja (léase catedral).
Pero en el caso de Salamanca, cuando deciden que su catedral románica estaba pasada de moda y era necesario levantar una nueva con aires actuales, mantuvieron la vieja, a sabiendas que construir una nueva conllevaría muchos esfuerzos económicos y tiempo, por lo que mantuvieron la antigua para seguir continuando con el culto hasta finalizar la nueva (la catedral nueva se construyó entre los siglos XVI y XVIII) .
Dos catedrales adosadas, como en simbiosis, formando un conjunto de tal proporción que al estar rodada de edificios hace muy compleja su visión, pero lo que el conjunto nos deja ver, desde fuera, es que la Catedral de Salamanca es grande, muy grande (una de las catedrales más grandes de España).
Catedral Nueva.
Nada más entrar te sorprende su tamaño (se puede hacer el chiste de para qué quieren una catedral tan grande si no hay nadie?).
Detalle del órgano de la catedral.
Impresionante la altura de sus naves.
Y la decoración de sus cubiertas.
Y sus columnas.
Detalle de la cúpula central, obra de Churriguera y por tanto de inspiración gótica.
La nave central queda rota por el coro.
Catedral Vieja.
Por una puerta situada en la fachada este entramos en la Catedral Vieja.
Románica de menores proporciones (pero aún así, grande), ha sufrido la mutilación de la nave norte, recortada por el muro que comparte con la catedral nueva.
La construcción de la nueva también se llevo por delante una parte del crucero, así como parte de su absidiolo.
Detalle del retablo mayor.
Obra de Nicolás Florentino, artista de la pintura renacentista.
La componen 53 tablas pintadas (una por cada semana de un año bisiesto).
Cúpula del cimborrio
Claustro de la catedral.
Fachada sur, donde podemos ver la unión de los dos edificios.
Palacio de Anaya.
Hoy Facultad de Filosofía y Letras.
De nuevo pasando por las Torres de la Clerecía y Casa de las Conchas.
Repuestas fuerzas, volvemos al ataque.
Volvemos a la catedral, para acceder a través de su torres a un paseo por sus alturas.
Pero antes pasamos ante su fachada oeste.
Portada del nacimiento (composición fotográfica, unión de tres fotos)
Impresionante.
Sería preciso una tumbona, unos prismáticos y muchas horas para desentrañar tanta información y belleza.
Con algo de zoom.
Palacio episcopal.
Por las alturas de la torre (la torre de la catedral nueva fue construida sobre el campanario de la catedral vieja).
Desde esta posición podemos apreciar la unión de las dos catedrales.
Al frente la techumbre de la nave central de la catedral vieja y el cimborrio sobre el crucero.
Un paseo por las alturas que nos lleva hasta el triforio de la catedral nueva (foto derecha), donde tenemos una visión de la nave principal a vista de pájaro.
La piedra de Salamanca tiene un tono sonrosado.
Al frente las Torres de la Clerecía.
Río Tormes.
Hacia el río Tormes.
Puente Mayor del Tormes.
Sería más acertado denominarlo Puente Viejo, a este antiguo puente romano construido a la segunda mitad del siglo I.
Con una longitud de algo más de 300 metros, este puente ha sido reconstruido y reparado a lo largo de los siglos.
Verraco de piedra, a la entrada del puente.
Puente Mayor del Tormes.
Escultura del Lazarillo de Tormes.
Huerto de Calixto y Melibea
Un pequeño jardín, escenario de los encuentros amorosos de los personajes de La Celestina.
Huerto de Calixto y Melibea.
Casa Lis
Un palacete modernista situado sobre la muralla medieval.
Bonito el edificio y bonita la exposición de esculturas que guarda en su interior.
Interior Casa Lis.
Universidad de Salamanca
La Universidad de Salamanca fue fundada en 1218 por Alfonso IX, siendo la más antigua del mundo hispano.
Destaca la fachada exterior de estilo plateresco (otro lugar donde sería preciso una tumbona, unos prismáticos y mucho tiempo).
Patio de las Escuelas Menores.
Con el monumento a Fray Luis de León.
Sierra de Francia
27 de enero de 2024
Su nombre si tiene que ver con el país vecino.
A finales del siglo XI, con el beneplácito de Alfonso VI, un gran número de franceses se afincaron en estas tierras, importando sus costumbres y las construcciones típicas de fachadas de entramado al estilo francés.
Hoy La Alcarria, San Martín del Castañar y otros pueblos circundantes muestran con orgullo su estilo particular de construcciones, al igual que muchos vecinos portan con orgullo el apellido Gascón, típicamente francés.
Santuario de Nuestra Señora de la Peña de Francia
Constituyen el conjunto un santuario, la iglesia, un convento de frailes, así como tres capillas exteriores.
Un estupendo mirador.
Hacia una sierra muy montaraz.
Interior del Santuario.
La leyenda.
Simón Roland (Paris 1384 - 1438) fue un francés con gran devoción religiosa que, en sueños, recibió el mensaje de que debía encontrar una imagen de la Virgen María en la Peña de Francia.
Tras buscar la imagen durante varios años por Francia y no encontrarla, decide hacer el Camino de Santiago y a su vuelta de Santiago de Compostela se desvía por la provincia de Salamanca, escuchando que al suroeste de ciudad de Salamanca existía una sierra con el nombre de Peña de Francia.
En San Martín del Castañar, recibe indicaciones precisas de como llegar a la montaña. Llegado a esta, al tercer día de estancia tuvo una aparición mariana que le indica la existencia de la imagen en la misma cima (al igual que diez años antes se le anunciara a la moza de Sequeros, Juana Hernández).
El 14 de mayo de 1434 Simón Roland encuentra la imagen (una Virgen negra) enterrada en lo alto de la Peña Francia.
Con posterioridad al descubrimiento cambia su nombre por el de Simón Vela y dedica todos sus esfuerzos a promover el culto a dicha imagen.
Capilla de Santiago.
Uno de los miradores de la Peña Francia.
A la semana siguiente, leemos en las noticias que un turista se despeñó desde uno de estos miradores.
San Martín del Castañar
El pueblo se levanta sobre un antiguo asentamiento romano, conserva restos de un castillo del siglo XV y un puente medieval.
Pero lo que nos lama la atención al momento de entrar en San Martín es el cariño con el que sus gentes cuidan sus viviendas.
La madera y la piedra se mezclan en armonía, creando un conjunto que rima con el entorno y trasmite placidez al caminante.
Disfrutamos recorriendo sus calles.
Plaza de toros de San Martín del Castañar (adosada a los restos del castillo).
Sequeros
Repuestos de la primera impresión de San Martín, entramos en Sequeros, que al primer golpe de vista, muestra su pasado como capital administrativa y judicial de la Sierra, con casas más grandes que las del resto de pueblos de la comarca, de granito y con varias alturas, construidas durante el siglo XIX y principios del siglo XX.
El nombre de Sequeros deriva de los secaderos de castañas que poseían las viviendas
Enclavado en la falda del cerro del Mariscal y rodeado de picos, valles y bosques de robles y castaños, a Sequeros se le conoce como el mirador de la Sierra de Francia.
La Alberca
El pueblo más conocido y turístico de la Sierra de Francia.
El primer pueblo español declarado conjunto histórico artístico en 1940, que ha experimentado pocos cambios en esta arquitectura serrana típica de la zona en los últimos siglos.
Resulto placentero deambular entre sus calles empedradas, rodeadas por edificios de varias plantas (muchos de ellos porticados) y con infinidad de pequeñas tiendas de souvenir y productos típicos de la zona, mientras la tarde iba dando paso con lentitud a una noche cerrada.
Morgarraz
Mogarraz nos depara una enorme sorpresa.
No por su arquitectura (que también sorprende si haces una inmersión directa en este pueblo) sino por ser una galería al aire libre, donde los retratos de sus vecinos aparecen colgados en las fachada de sus edificios.
La historia de los retratos de Moraggar surge a finales del siglo anterior, cuando el artista salmantino Florencio Maíllo encuentra los negativos de un fotógrafo que retrato a los vecinos de Mogarraz en 1960 (que tenían que renovar el carnet de identidad).
Florencio pinta las caras de los vecinos sobre unas chapas y las cuelga en las fachadas de sus casas.
De los 388 retratos originales se ha pasado en la actualidad a unos 800.
Es en Mogarraz donde pasamos noche, en una típica casa (reformada con todas las comodidades) que en su origen no conoció la escuadra para su construcción.
La casa donde hacemos noche (la de la esquina) y las vistas desde la ventana.
Peña Carbonera desde Puerto del Portillo
28 de enero de 2024
De momento habíamos visto la Sierra de Francia desde las alturas, a vuelo de pájaro.
Era momento de descender sobre el terreno, a conocer sus rocas, su vegetación, mientras ascendíamos a una pequeña cima (Peña Carbonera encuadrada en la Sierra de la Alberca) donde volveríamos a disfrutar de los paisajes infinitos.
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El dedo de Dios |
Puerto del Portillo (Sierra de la Alberca).
Al fondo del valle, Las Batuecas.
Un camino sencillo pero agreste, donde predomina la encina.
Vista atrás.
Cuarcita.
Ante el dedo de Dios.
Hemos cambiado de ladera, la encina da paso al pino de repoblación.
Al fondo la Peña Francia.
Con algo de zoom, Peña Francia y su santuario.
Encarando la última parte de la ascensión.
Refugio (cerrado).
Con Peña Francia al fondo.
Cima de Peña Carbonera (1505 msnm)
Descendiendo por las pistas de la cara noreste (mucho más cómoda).
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